Jan Tschichold (1902-1974) fue un destacado diseñador y tipógrafo alemán, autor de la obra Die neue Tipographie (La nueva tipografía) que sentó las bases de tipografía actual, siendo, uno de los libros más importantes sobre tipografía del siglo XX.

Jan Tschichold nació en Leipzig en 1902. A los doce años visitó en Leipzig la Internationale Ausstellung für Buchegewerbe und Gaphik, más conocida como Bugra, que tuvo lugar en aquella ciudad en 1914 y que mostraba un panorama del diseño editorial alemán de aquel momento. Tschichold decidió convertirse en profesor de dibujo para lo que se trasladó a Grimma, una ciudad cercana a Leipzig, donde podía iniciar sus estudios.

Allí, estudio de la caligrafía y comenzó a interesarse por las técnicas para la creación de punzones lo que terminó por inclinarlo hacia el diseño de tipos de letra. Luego se fue a estudiar a la Academia de Artes Gráficas de Leipzig con tan sólo diecinueve años.

Entre 1921 y 1925 produjo carteles caligráficos para las distintas ferias comerciales que tenían lugar en Leipzig y comenzó a ser conocido como calígrafo y rotulista, incluso fuera de Alemania. Por aquellos años, comenzó a sentirse impresionado por la ruptura que representaban los movimientos de vanguardia.

Hacia 1923 se interesó por el Suprematismo y el constructivismo y conoció la primera gran exposición de la Bauhaus en Weimar y el catálogo que para la ocasión había diseñado Herbert Bayer. El giro radical de su concepción tipográfica quedará en evidencia en un cartel para el editor de Varsovia Philobiblon en el que aplica las nuevas ideas del Movimiento Moderno con una composición asimétrica e inclinada. Poco a poco estas ideas le van separando de la tipografía tradicional y en octubre de 1925 publica en la revista de Leipzig, Typographische Mitteilungen, una especie de manifiesto bajo el título de Elementare Typographie que recogía una serie de principios:

1. La nueva tipografía está orientada hacia la función.

2. La función de cualquier pieza de tipografía es la comunicación [a partir de los medios que le son propios]. La comunicación debe aparecer en la forma más breve, simple y urgente.

3. Para que la tipografía pueda atender fines sociales, se requiere la organización interna de su material [ordenación del contenido] y su organización externa [los medios de la tipografía configurados en relación los unos con los otros].

4. La organización interna es la limitación a los medios elementales de la tipografía: letras, números, signos y corondeles obtenidos de la caja o las máquinas de composición. En el mundo actual, la imagen exacta [la tipografía] también pertenece a los medios elementales de la tipografía [typo-foto]. La forma elemental de la letra es la grotesca o sans serif en todas sus variantes: fina, medium y negrita; desde la estrechada a la expandida […] Se puede economizar extraordinariamente a partir del uso exclusivo de letras minúsculas; eliminando todas las mayúsculas. Nuestra escritura no pierde nada escribiendo sólo en caja baja, al contrario, resulta más legible, fácil de aprender, más económica: Un sonido, un signo. […] A través del uso altamente diferenciado de cuerpos y tipos, y sin consideración estética previa alguna, la composición lógica del texto impreso se hace visible. Las áreas no impresas del papel son elementos perceptibles de diseñar tanto como las formas verbales impresas.

5. La organización externa es la búsqueda compositiva de los contrastes más intensos [simultaneidad] a través de formas, tamaños y pesos diferenciados [los cuales deben corresponder con los valores de su contenido] y la creación de relaciones entre los valores formales positivos [mancha] y los valores negativos [blanco del papel].

6. El diseño elemental tipográfico consiste en la creación de la relación lógica y visual entre las letras, las palabras y el texto, la cual queda determinada por las características específicas de cada trabajo.

7. Con el fin de incrementar el carácter de urgencia de la nueva tipografía, se pueden utilizar líneas verticales y diagonales como medios de organización interna.

8. La práctica del diseño elemental excluye el uso de cualquier tipo de ornamento. El uso de corondeles y otras formas elementales inherentes [cuadrados. círculos, triángulos] deben estar fundamentados convincentemente en la construcción general. Su uso decorativo-artístico no está en consonancia con la práctica del diseño elemental.

9. El orden de los elementos en la nueva tipografía debería basarse en el futuro en la estandarización del formato en los papeles según las normas DIN. En particular DIN A4 [210 x 297] debería ser el básico para los papeles de cartas y otros impresos comerciales.

10. El diseño elemental no es, tanto en tipografía como en otros campos, absoluto ni excluyente. Ciertos elementos varían a partir de nuevos descubrimientos, como, por ejemplo, la fotografía, por lo que el concepto mismo de diseño elemental cambiará necesaria y continuamente.

Tschichold fue el único difusor de las corrientes de vanguardia cuyo mensaje podía ser entendido por los impresores y la gente de las artes gráficas. Sus ideas que tuvieron difusión en Alemania fueron objeto de lógica polémica. Aquel año se fue a Berlín y se estableció como diseñador free-lance para Insel Verlag. En junio de 1926, por recomendación de Paul Renner, fue a Munich para enseñar en la Escuela de Artes Gráficas, donde, hasta 1933 impartiría unas 30 horas semanales de clase a grupos de al menos 25 alumnos.

En Munich hizo sus célebres carteles de cine para el Phoebus Palace en los que utilizaba tipografía, fotos y colores planos, muy influenciadopor Lissitsky, Moholy-Nagy y Man Ray. En 1928 diseñaría y publicaría su primer libro: Die neue Typographie, la primera obra sobre los principios del diseño tipográfico. El libro de Tschichold fue el primero concebido para diseñadores tipográficos y recogía cuantas innovaciones estaba introduciendo el Movimiento Moderno en aquellos años. Estaba compuesto en A5, encuadernado en negro como una parte del lomo en plata y compuesto en palo seco. El libro está compuesto utilizando versales y caja baja. Hacia 1930 abandonaría por completo el uso exclusivo de la caja baja.

Luego se traslada Suiza donde se dedica al diseño editorial; esencialmente en la puesta en orden de los elementos tipográficos de diversos editores establecidos en Basilea. En 1935 publicó Typographische Gestaltung, compuesto en Bodoni e impreso en distintos tipos de papel.

En 1947 Tshichold aceptó la propuesta de editorial inlgesa Penguin Books para rediseñar las portadas de sus libros. Antes de comenzar a rediseñar, formuló unas reglas conocidas como Penguin composition rules que servían para que la comunicación entre el autor y el lector fueran más precisas ya que se detallaban los márgenes, títulos, adornos, símbolos que aparecían en los libros; las Penguin composition rules son consideradas el primer Manual de estilo para una colección de libros. Para los libros no existía una única tipografía, dependiendo del contenido del libro se decidía el tipo de letra que iba a ser empleado, es por eso que se tenía que hacer un diseño particular para cada uno de los libros. Tschichold creó cerca de 500 portadas para Penguin.

En 1960, la casa fundidora Linotype encomendó a Tschichold la responsabilidad de crear un tipo de letra que pudiera utilizarse tanto en monotipia como en linotipia. El estilo tenía que ser parecido al Monotype Garamond pero más estrecho en un 5% para de esta manera poder ahorrar espacio. Fue así como surgió la letra Sabon, uno de los principales tipos desarrollados por Tschichold. El nombre de Sabon se debe a Jacques Sabon, un fundidor francés que trabajó en Francfort con matrices originales de Garamond.

En 1968 Tschichold abandonó Basilea y se fue a vivir a Berzona en el Ticino. Falleció de cáncer en Locarno el 11 de agosto de 1974.

Lo vimos en UNOSTIPOSDUROS.